Muchos juegos se pueden considerar joyas de la programación y muchos son los que dejan estela (por años que pasen), sin embargo, pocos CD-ROMS merecen valer los 200 euros…

Radian SilverGun es un juego de naves de la mano de Treasure que, a finales de los 90, dejó perplejos y sin argumentos a la gente que tachaba a la Saturn de mala consola y de fracaso innegable de SEGA.

Si bien es verdad que este juego salió tanto para PSX como Saturn, esta última versión es la que recaudó mejores críticas debido en parte a su glorioso MODO SATURN y por lo que representó para dicha consola. Demostró que con un poco de empeño por parte de las desarrolladoras de software la consola de SEGA era una máquina capaz de luchar, cara a cara, con la todopoderosa Playstation.

Con sólo poner el CD en la consola ya nos percatamos de que el juego tiene aires de grandeza. Unos menús futuristas muy bien realizados y una introducción de una calidad pocas veces vistas en la consola de SEGA.

Una cinemática (en formato MANGA) en pantalla completa y no pixelada en exceso que nos mete de lleno en la historia y nos avanza que el juego no será uno más…

El juego transcurre, en su totalidad, en fases verticales al más puro estilo “Shot em up” de toda la vida, pero a pantalla completa. Tal y como se merece un juego de ese tiempo.

Desde el principio contamos con un arsenal muy completo y variado que nos permite múltiples efectos y combinaciones de tiro.

Hasta aquí todo correcto y similar a cualquier otro juego del género, sin embargo, la cosa cambia en el apartado gráfico.

Nitidez, grandiosidad en los enemigos y unos efectos le luz y color que dejan aturdido al más pintado. Si no fuera por alguna insignificante ralentización en momentos de máxima explosión, juraríamos que estamos frente a una NAOMI.

Recordemos que este juego no era original de NAOMI, sino de la placa Arcade específica de SATURN, la ST-V.

No sé si podemos hablar de versión “pixelperfect” porque no he visto la original, pero creed que está a un nivel altísimo.

El apartado sonoro es buenísimo con una música que cumple a la perfección mediante melodías muy bien escogidas que en ningún momento llegan a cansar.

Sus efectos de sonido están también a la altura de lo deseado con unos disparos y explosiones casi reales que, sumados a la voz de tus superiores comentándote la misión, hacen que con un poco de imaginación nos traslademos en plena batalla interestelar.

La jugabilidad: sublime. Como en todo buen mata marcianos: respuesta inmediata al mando y con gran suavidad.

La acción no decae en ningún momento y la sucesión de jefes en pantalla hacen que no te puedas distraer ni un solo segundo.

Mención especial para la variedad de jefes y su grandiosidad. La dificultad del juego es alta, pero con diez vidas y nivel fácil, nos podemos permitir jugar cómodamente y disfrutar a tope de los detalles gráficos.

Los gráficos, son sin duda el punto fuerte del juego. Jefes enormes, escenarios muy trabajados en lo visual, explosiones indescriptiblemente bellas y un sinfín de coloridos en pantalla que hacen de éste, el juego más logrado jamás visto en una Sega Saturn.

Una verdadera pena que no salieran más juegos de este calibre para la consola de SEGA ya que esto habría hecho sudar a la Playstation en la lucha por el reinado de los 32 bits.

¡Un diez en todos los sentidos!

Seguramente, algunos de vosotros lo encontraréis sobre valorado (más de 200 euros por un juego en CD…), pero después de jugarlo, se entiende que juegos así se hagan pagar.

Imprescindible para todos los amantes del género y coleccionistas y más que recomendable para el resto de usuarios.

Lástima que su precio lo haga exclusivo a unos pocos… Sin embargo, para admirarlo y disfrutarlo, un buen backup está justificado.

Al igual que pasa con EINHÄNDER, este juego  no se puede valorar por vídeos del YOUTUBE, ya que su fluidez y calidad se ven grotescamente mermados.

Provadlo en directo y ya me contaréis…